Se precisan técnicos de laboratorio voluntarios para nuevo laboratorio de análisis clínicos de Covid 19
Mandad C. V a: voluntarios.cornavirus@ucm.es
La transformación del Monasterio de Santa Clara de Sevilla: un nuevo modelo de patrimonio vivo en el corazón histórico.
La recuperación del Real Monasterio de Santa Clara supone uno de los proyectos de regeneración patrimonial más determinantes del presente siglo en Sevilla. Con una inversión superior a los 8,5 millones de euros y un plazo de ejecución estimado de 36 meses, la intervención abarca la restauración integral de la portada barroca, el compás histórico, la puerta reglar y diversas dependencias monacales, con un objetivo inequívoco: devolver a la ciudad un espacio hasta ahora inaccesible, dotándolo de nuevos usos culturales, sociales y experienciales sin renunciar a la autenticidad de su identidad sagrada y silenciosa.
El proyecto no se limita a una puesta en valor museística. Se trata de una relectura activa del patrimonio, que recupera los trazados originales, interpreta arquitecturas ocultas y habilita infraestructuras universales de accesibilidad física y cognitiva, combinando tecnología, respeto histórico y visión contemporánea.
A lo largo del recorrido, se introducen usos compatibles que redefinen la relación entre ciudadanía, memoria y arquitectura conventual.
La portada barroca del siglo XVII, verdadero pórtico espiritual del recinto durante siglos, será restaurada mediante un proceso conservativo minucioso. Se eliminarán repintes, se consolidarán los elementos cerámicos originales y se recuperará el cromatismo histórico mediante análisis estratigráfico.
El pavimento original —losa de Tarifa de 20 x 20 cm combinada con chinos lavados— será cuidadosamente levantado, tratado y recolocado respetando su geometría primigenia. La intervención no busca reinterpretar, sino restituir el alma arquitectónica exacta del acceso conventual original, devolviéndole su fuerza ritual.
El compás, de unos 800 metros cuadrados, será restituido como espacio de transición emocional entre la calle y la clausura. Se recuperarán pavimentos antiguos con criterio arqueológico; la fuente será desmontada, restaurada y reinstalada como pieza axial; la vegetación será podada sin alterar sus especies esenciales; la iluminación se integrará de forma invisible, evitando impacto visual.
No se trata de monumentalizar, sino de recrear el silencio patrimonial en un umbral de acceso vivo, preparado para acoger tanto visitantes como pequeñas actividades culturales de baja intensidad.
Una de las piezas más significativas del nuevo programa será la incorporación de un mueble cafetero de cajón y puerta en el interior del área prevista como cafetería. Se trata de un equipamiento diseñado con máxima sobriedad y criterio reversible, que no altera muros históricos ni introduce elementos irreversibles, integrándose mediante ensamblajes respetuosos, proporciones silenciosas y acabados operativos pero discretos.
Para garantizar estándares profesionales de higiene, durabilidad y normativa hostelera, el espacio incorporará un mueble cafetero acero inoxidable en su interior técnico, idéntico al utilizado en restauración avanzada contemporánea. Su elección responde a criterios sanitarios y funcionales, jamás estéticos, asegurando alto rendimiento operativo sin interferir visualmente con el valor patrimonial de la sala.
Este enfoque se alinea con las nuevas tendencias en maquinaria hosteleria aplicadas a edificios históricos: arquitectura reversible, diseño funcional silencioso y capacidad de desinstalación íntegra sin huella física. Cada componente ha sido seleccionado para operar con profesionalidad contemporánea sin perturbar la liturgia espacial original, respetando proporciones, recorridos visuales y atmosferas de luz.
La intervención actuará sobre patologías estructurales críticas: forjados podridos, humedades agresivas, vegetación invasiva y añadidos distorsionantes del siglo XX. Se aplicarán morteros de cal tradicionales, se desmantelarán tabiques recientes, y se revelarán elementos arquitectónicos ocultos —como los óculos tetralobulados, pinturas murales góticas y lavaderos monacales originales— integrados como lecturas sinceras del tiempo estratificado, no como falsos decorados miméticos.
Las antiguas porterías serán convertidas en control de acceso e información al visitante; la casa del capellán será adaptada como tienda y aseos; las edificaciones anexas se transformarán en salas expositivas con narrativa contextualizada, interpretando la vida monástica desde sus códigos espaciales reales.
La puerta reglar —antiguo filtro espiritual de clausura— se reactivará como acceso principal contemporáneo, recuperando su dimensión ritual, ahora reinterpretada como umbral cultural abierto a la ciudad.
El objetivo final es inequívoco: el Monasterio de Santa Clara no será un museo congelado ni un escenario turístico; será un lugar activo, sensorial y consciente, donde el ciudadano sea invitado a habitar el silencio, comprender la historia desde la emoción y convivir con la arquitectura como tiempo acumulado.
La cafetería será un espacio de pausa contemplativa —no consumo acelerado— y el recorrido expositivo combinará autenticidad material, narrativa histórica y accesibilidad cognitiva mediante herramientas digitales avanzadas como realidad virtual inmersiva.
Comparativa técnica del tiempo de descarga exacto entre modelos de extintores de co2 de 2 kg y 5 kg. Análisis profesional del rendimiento operativo en extinción con dióxido de carbono.
En el ámbito de la protección contra incendios, la evaluación precisa del comportamiento real de cada equipo es determinante para seleccionar la solución más eficaz según el riesgo. La descarga del dióxido de carbono, su estabilidad durante la aplicación y la capacidad de control operativo son variables críticas que influyen directamente en el éxito de la intervención. A continuación, presentamos un estudio exhaustivo que profundiza en las diferencias funcionales entre los extintores de co2 de 2 kg y 5 kg, proporcionando un marco técnico riguroso para la toma de decisiones en entornos residenciales, comerciales e industriales.
El extintor de co2de 2 kg constituye una herramienta compacta, ágil y orientada a intervenciones inmediatas en espacios limitados. Su estructura ligera optimiza la maniobrabilidad y permite actuar con precisión en riesgos eléctricos y focos de fuego con hidrocarburos en cantidades reducidas.
El contenido presurizado se libera en un lapso operativo breve, lo que obliga a una aplicación firme y dirigida desde el primer instante. Debido a su caudal concentrado y al reducido margen temporal disponible, este equipo exige que la actuación sea meticulosa y sin interrupciones. Su uso resulta especialmente pertinente en pequeñas infraestructuras técnicas, paneles eléctricos, vehículos y zonas con equipamiento sensible que requieren una extinción limpia sin residuos.
El extintor co2 5 kg destaca como solución profesional para áreas donde el riesgo de propagación supera la capacidad de respuesta de un equipo portátil pequeño. Su mayor volumen de agente, junto con una descarga más prolongada, amplía el control operativo y mejora la eficacia en escenarios donde el fuego puede presentar evolución rápida.
Este modelo permite dirigir un chorro continuo con mejor estabilidad, proporcionando un margen de actuación más seguro y eficiente. Su alcance ampliado reduce la necesidad de aproximación al foco, lo que disminuye la exposición térmica del operador. En industrias, cocinas profesionales y zonas de almacenamiento con líquidos inflamables, constituye una herramienta de alto rendimiento y fiabilidad.
Al hacer la comparativa de tiempo de descarga exacto para extintores CO2 de 2 kg y 5 kg, encontramos que la diferencia más decisiva entre ambos modelos radica en el tiempo de descarga. En los extintores de co2, esta variable define la capacidad real de mantener el desplazamiento del oxígeno y sostener la reducción de temperatura del foco durante la intervención.
Los modelos de 2 kg presentan un vaciado rápido que oscila entre 6 y 10 segundos, mientras que los de 5 kg alcanzan descargas continuadas de 12 a 18 segundos. Este rango ampliado influye directamente en la capacidad de controlar fuegos con líquidos inflamables, derrames o superficies de riesgo más extensas.
La descarga prolongada incrementa la efectividad, asegura mayor estabilidad del chorro y favorece la extinción completa, minimizando la probabilidad de reactivación.
Las pruebas de laboratorio y los análisis operativos señalan diferencias notables en cuanto a alcance, caudal y continuidad del chorro. Mientras que el modelo menor está diseñado para ataques puntuales, el modelo de mayor capacidad permite un uso más táctico, manteniendo la estabilidad en la columna de CO2 y ampliando la ventana de acción del operador.
En términos de cobertura, los equipos de 2 kg alcanzan entre 1,5 y 2 metros, mientras que los de 5 kg cubren entre 2 y 3 metros. Esta diferencia implica una mejora sustancial en la seguridad del operador, especialmente en incendios eléctricos donde la distancia es un factor clave.
La eficiencia del CO2 en aplicaciones reales depende en gran medida del tiempo que se puede sostener el flujo. Por ello, el modelo de 5 kg muestra un rendimiento superior, permitiendo desalojar oxígeno de manera continua, reducir la temperatura del foco y evitar reencendidos.
La rapidez de vaciado en estos equipos está condicionada por múltiples variables asociadas al diseño, la presión interna y la temperatura ambiente. El diámetro de la boquilla y el caudal certificado determinan la velocidad con la que el agente gaseoso se expande tras su liberación.
En los extintores de menor capacidad, el volumen limitado acelera la transición del dióxido de carbono desde el estado líquido al gaseoso, generando una descarga intensa pero breve. En los de 5 kg, el equilibrio entre presión y volumen proporciona una descarga más estable y mantenida.
Estas diferencias son decisivas para seleccionar el equipo adecuado. La maniobrabilidad del modelo pequeño es su principal fortaleza, mientras que el mayor tiempo de intervención convierte al modelo de 5 kg en la opción más robusta para instalaciones con riesgos importantes.
Un chorro más prolongado permite sostener la reducción de temperatura y mantener la ausencia temporal de oxígeno en el foco del incendio. Esta continuidad es crucial en fuegos de líquidos inflamables, donde los vapores pueden volver a entrar en combustión si la descarga es insuficiente.
Los equipos con descarga corta exigen una intervención precisa, sin margen de corrección. Un fallo en la aplicación puede dejar zonas activas que, posteriormente, generen un reinicio del fuego. En cambio, un extintor con más capacidad proporciona redundancia operativa y reduce el riesgo de reactivación.
Los equipos de 2 kg ofrecen un rendimiento óptimo en aplicaciones domésticas y pequeñas oficinas donde se requiere protección puntual y extinción limpia. Para instalaciones técnicas con riesgo elevado, como cocinas industriales, centros de transformación o áreas de manipulación de líquidos inflamables, la opción de 5 kg es la más adecuada.
Su prolongado tiempo de descarga, su mayor alcance y la estabilidad del chorro proporcionan un control superior, adaptándose a escenarios donde un error podría ocasionar pérdidas críticas.
Los requisitos establecidos por UNE-EN 3 aseguran la uniformidad en el comportamiento de los extintores, garantizando caudales mínimos, resistencia estructural y condiciones de uso seguras. Aunque no fijan tiempos exactos, sí establecen rangos que los fabricantes deben cumplir para asegurar su eficacia en aplicaciones reales.
La descarga debe ser suficientemente rápida para lograr sofocación inmediata, pero no tan breve que comprometa la continuidad operativa. Por ello, los extintores de 5 kg alcanzan valores más equilibrados para un uso en entornos de riesgo medio y alto.
En términos operativos, el extintor de 5 kg ofrece una ventaja determinante: mayor tiempo de aplicación, mayor alcance y mayor control sobre el foco del incendio. Para infraestructuras sensibles, industrias y hostelería, representa la opción más eficiente y segura. El equipo de 2 kg sigue siendo una solución fiable y eficaz para entornos con riesgos puntuales y espacios reducidos.